¿Qué es la fatiga visual y cómo puedes evitarla?

 

Síntomas de fatiga ocular

Los signos más comunes de la fatiga ocular son:

  • Dolor de ojos

  • Sequedad y malestar

  • Visión borrosa y nebulosa

  • Dolor de espalda y cuello

  • Visión doble

  • Dificultad para enfocar y concentrarse en los objetos

  • Sensibilidad a la luz, tanto natural como artificial

  • Sensación de opresión en las sienes y la frente

  • Dolores de cabeza frecuentes, como las migrañas

Tipos de fatiga ocular

Un término común para la fatiga ocular general es astenopía. Ocurre cuando los ojos duelen y se sienten fatigados. Los tipos de fatiga ocular van desde el SVI (síndrome visual informático) hasta el astigmatismo. Es posible que tengas SVI después de leer en la pantalla de un ordenador o de un teléfono móvil durante varias horas. Cuando los músculos del ojo trabajan durante muchas horas, a las pupilas les resulta difícil absorber la exposición constante a los rayos sin descanso, lo que provoca el agotamiento del ojo. El astigmatismo tiene algunos síntomas en común con el SVI; sin embargo, este tipo de fatiga ocular se debe a la curvatura incorrecta de la córnea. Esto puede crear fatiga ocular debido al esfuerzo adicional necesario para enfocar cuando se tiene visión borrosa.

La forma de contrarrestarlo es con gafas. El uso de gafas puede mejorar tu visión, al tiempo que reduce la carga de tus ojos. También te recomendamos que duermas lo suficiente para descansar bien los ojos. Otras soluciones, como ajustar el brillo de la pantalla o cambiar la configuración de la luz de la habitación, también pueden aliviar la fatiga ocular. Todas estas opciones pueden reducir la fatiga ocular y mejorar la salud de los ojos.

Tratamiento de la fatiga ocular

He aquí algunas formas de prevenir, reducir y, en ocasiones, eliminar la fatiga ocular:

  • Dales a tus ojos mucho descanso: no hay nada como cerrar los ojos y sentir esa sensación de frescor después de un largo y agitado día. Aunque no puedas cerrar los ojos durante mucho tiempo, tómate un momento para cerrarlos durante unos segundos cuando sea posible.

  • Ajusta la iluminación: el tipo de luz con el que trabajamos desempeña un papel fundamental en la salud visual. Evita trabajar y leer con poca luz y, siempre que sea posible, sustitúyela por una luz más natural, como la del sol.

  • Uso de ordenadores y teléfonos móviles: nuestra vida cotidiana gira en torno a estos dos dispositivos. Aunque normalmente no se puede dejar de utilizar el ordenador, el portátil o el teléfono móvil, se puede ajustar el brillo de la pantalla a un nivel más adecuado para la lectura.

  • Haz descansos frecuentes: realizar cualquier tarea durante mucho tiempo en un mismo lugar puede ser agotador tanto visual como físicamente. Levántate y date un breve paseo durante unos minutos. También puedes añadir algunos estiramientos y practicar ejercicios oculares, como la regla de los 20-20-20: después de 20 minutos de trabajo de cerca, mira algo a unos 6 metros de distancia y concéntrate en ello durante 20 segundos.

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